La Mar Menuda es un lugar con un encanto único y especial de la pintoresca villa de Tossa de Mar, en la Costa Brava. Un enclave privilegiado donde el mediterráneo despliega toda su belleza y que ha resultado ser de lo más inspirador para la interiorista Mercè Borrell, quien recibió el encargo por parte de Golden Hotels de reformar las zonas comunes y habitaciones del Hotel Golden Mar Menuda.
Mercè Borrell ha trasladado al Golden Mar Menuda su nueva forma de hacer interiorismo en los establecimientos hoteleros, basada en conectar con las emociones y sensaciones: “He plasmado un diseño interior que está íntimamente ligado a las experiencias vivenciales de los huéspedes del hotel, quienes vienen a disfrutar del mar y el sol, de ratos de buceo y de relax en primera línea de mar”.
El proyecto, que rebosa sabor a mediterráneo por los cuatro costados, destaca por las alusiones al entorno natural en el que se ubica.
Las claves del proyecto de interiorismo
Sol, mar y arena. En las habitaciones el blanco es el protagonista simbolizando la luz del sol mediterráneo, el azul del mar está presente en los textiles, la arena está representada mediante cuadros ornamentales realizados con cañas de mimbre natural y también en los suelos de madera.
Grandes ventanales y muchísima claridad. Su privilegiada ubicación en primera línea de mar hace necesaria la vinculación del proyecto con el entorno mediterráneo.
Mobiliario en tonos nude y tonos azul marino en el nuevo restaurante SaCalma. Aquí se han resuelto las necesidades de la propiedad con mobiliario a medida y adaptación a la arquitectura existente.
Ornamentación natural de mimbre trenzado en techos o paredes. Lámparas, cuadros y otras decoraciones son totalmente orgánicas, en clara alusión al entorno natural del hotel.
En los baños el mar Mediterráneo es protagonista de nuevo, azulejos en tonos azul marino, mobiliario de cerámica en blanco.
