Reportajes

Tapicería y cortinaje

Los textiles son elementos clave para aportar calidez y estilo a cualquier hotel o restaurante. Cortinas, alfombras, tapicería, etc. no solo decoran, sino que también reflejan la identidad de la marca, y crean una atmósfera acogedora y elegante que atrae a los clientes.

Por Isabel Fernández

Barcelona Borneta

Los tejidos empleados en cortinas y tapicerías son uno de los elementos más significativos en la decoración de un establecimiento. Las texturas y colores usados en la decoración de la habitación de un hotel u otras instalaciones, como pueden ser restaurantes o zonas nobles, contribuyen a la creación de un ambiente especial, acogedor y único.

El estilo, bien sea tradicional o minimalista, es importante, pero mucho más es la aportación que al mismo le confiere el tejido elegido. Todas las telas seleccionadas deben armonizar para tener como resultado un espacio tranquilo y relajante.

Beatriz Gancedo, embajadora de la marca Gancedo, considera que, “hoy en día, hay un mayor interés por crear sensaciones táctiles. El auge de la IA y la constante interrelación con la tecnología hace que las personas busquen espacios que les hagan sentir bien, lugares confortables. Los tejidos, y en concreto las cortinas, invitan al recogimiento, evitan el ruido y buscar transmitir intimidad. Los visillos tamizan la luz y también pueden ser utilizados para dividir distintos espacios y crear varios ambientes”.

La elección de los diferentes tejidos para tapicería y cortinas se apoya en su funcionalidad, diseño y relación calidad-precio. Una característica que no se puede eludir en cualquier proyecto horeca es que los tejidos deben ser ignífugos y cumplir con todos los requerimientos técnicos que las normativas vigentes exijan en todo momento.

Javier Miró, director de Marketing y Comunicación de Aquaclean, opina que “la selección de los materiales es fundamental no solo por la estética, sino también por su impacto en la durabilidad y el mantenimiento. En un entorno hotelero, donde el uso intensivo y la necesidad de mantener altos estándares de limpieza y apariencia son constantes, la elección de los materiales adecuados garantiza una experiencia positiva para los huéspedes y una inversión rentable para los operadores del hotel”.

Además, Berta Navarro, product design en Calma House, sostiene que, “cuando hablamos de un tejido, lo primero que debemos tener en cuenta es el material del que está hecho, junto a la finalidad y funcionalidad del artículo. En el caso de las cortinas, según el espacio que ocupen y la presencia que queramos que tengan, elegiremos un material u otro. Se debe ofrecer una amplia gama de opacidades en el sector del cortinaje, así el cliente puede escoger la cantidad de luz que entra en la estancia. A su vez, según la estancia, se puede elegir desde un gramaje más vaporoso y translúcido a una cortina más gruesa, con más presencia, consiguiendo más opacidad”.

Por otra parte, se debe tener en cuenta el uso particular que el establecimiento hotelero pretende con su utilización, es decir, si son o no meramente decorativos, su nivel de opacidad para evitar total o parcialmente la entrada exterior de luz, necesidades de propiedades acústicas en caso de necesitar minimizar la presencia de ruido exterior, la posibilidad o necesidad de utilizar tejidos con propiedades antibacterianas y también, en algunos casos, la utilización de materiales naturales, reciclados, ecológicos, provenientes de fuentes sostenibles o con muy bajo nivel contaminante.

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