Organización y conservación
Cuando las empresas escogen sus equipos para catering buscan una combinación entre funcionalidad, diseño, calidad y precio, considerando también la variedad y las sugerencias que las compañías especializadas en el sector les puedan aportar.
La comida que se prepara para un catering se realiza en cocinas centrales y se transporta al destino donde se vaya a hacer la celebración o un centro comedor mediante dos líneas de distribución: caliente y fría. La caliente se basa en elaborar platos a través de procesos de cocción más o menos convencionales y mantenerlos calientes a más de 67 ºC hasta el momento de consumirlos sin romper bajo ningún concepto y en ningún momento la cadena de calor. De esta manera, alcanzar esta temperatura garantiza la seguridad del alimento, que ha sido higienizado por el tratamiento térmico y así se impide la proliferación de microorganismos.
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