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En Navidad, la mesa se convierte en el corazón del hogar. Es el lugar donde las historias se cruzan, los sabores se recuerdan y cada detalle habla de cariño. Por eso, elegir cómo vestirla se convierte en un gesto lleno de significado. Con esta idea nace Champagne, la nueva colección de mantelerías de Navidad de Carmela Martí Decoración, que crea un escenario elegante y acogedor, pensado para disfrutar y compartir.
La colección redefine el lujo discreto a través de la sofisticación de lo esencial. Champagne surge como ese equilibrio perfecto entre elegancia y calidez. Cada tejido (mantel, servilleta o camino) habla sutilmente, pero con gran presencia.
Confeccionada en mezclas premium como el 60 % poliéster y 40 % algodón, o en 100 % poliéster para opciones más funcionales, esta colección de mantelerías de Navidad ofrece texturas con carácter y una paleta cromática amplia. Así, los colores de los textiles de mesa van desde los dorados más navideños hasta los blancos invernales, pasando por tonos tierra y marrón chocolate, muy en tendencia, que evocan la naturaleza en calma.
Una buena mesa navideña no se improvisa. Se compone como una obra de arte a través de capas, texturas y detalles. Y ahí es donde destacan los modelos de las mantelerías de Navidad de Champagne:
• PYX Hungaria, con su textura suave y elegante en tonos como el arena o el blanco nieve. Ideal para cenas con velas y vajillas clásicas.
• PYX Livenzo, con un dibujo más ornamental, perfecto para quienes buscan un toque de distinción tradicional pero muy actual.
• PYX Comora, con un tejido muy sencillo, ideal para mesas más sobrias que se pueden complementar con decoración vegetal y cerámica de cariz artesanal.
• PYX Abacarte, con su apuesta por tonos cálidos y una textura que evoca lo natural, es una apuesta segura para quienes prefieren manteles individuales.
• PYX Ipaneli que, con su rojo, es puro espíritu navideño con un giro contemporáneo gracias a sus motivos de inspiración botánica. Para las mesas más atrevidas, se puede complementar con una vajilla negra combinada con una cubertería dorada.
Por tanto, cada una de las mantelerías navideñas de Champagne se adapta a cada necesidad y estilo. Desde combinar manteles largos con caminos para crear volumen, hasta dar un toque más sencillo y calmado con manteles individuales.
Navidad es compartir sin prisa. Y la decoración supone ese detalle que marca la diferencia. Una mantelería bien elegida consigue que una cena sea una escena inolvidable. Cuando los textiles acompañan la historia, la mesa se transforma en un espacio de encuentro, emoción y estilo.
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