Uno de los grandes retos de Faro Barcelona para el año 2022 ha sido conseguir la certificación del cálculo de la Huella de Carbono, conforme al estándar internacional ISO14064-1.
Se trata de la medición de la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos en la ejecución de sus actividades durante los años 2019, 2020 y 2021. Además, en los tres ultimos años, Faro Barcelona ha conseguido reducir su huella de carbono más de un 14% fruto de las iniciativas de sostenibilidad implementadas en este periodo. Esta certificación constituye, sin duda, un gran hito en el compromiso de la firma para contribuir a la reducción de impactos negativos en el planeta. Gracias a esta certificación, es posible detectar los aspectos más críticos en el ámbito de la Huella de Carbono e identificar áreas de mejora. Una oportunidad para conocer el volumen real de emisiones de gas invernadero que la entidad genera para implementar estrategias de compensación a través de diferentes programas.
Uno de los retos más importantes llevados a cabo por Faro Barcelona ha sido el ecodiseño de sus productos, centrando el foco en metodologías que identifican los impactos medioambientales desde el momento de su conceptualización, además de la optimización en su desarrollo y posterior producción. Cabe destacar también el uso de materiales de calidad en los componentes de cada producto para una mayor durabilidad de los mismos, minimizando así la obsolescencia programada. Otras estrategias implementadas en favor de la sostenibilidad en las áreas de logística, transporte y almacenaje son la utilización de embalajes con cajas de cartón reciclado, impresas a una sola tinta y sin grapas para facilitar así el desmontaje de cajas y su correcto reciclaje. Se han eliminado también los plásticos de un solo uso y se han reemplazado por bolsas de papel reciclable, así como el polipropileno por celulosa reciclada en algunos empaques, y el uso de virutas de cartón reciclado para la protección del producto durante el transporte en más del 50% de los envíos. Todo ello forma parte de un programa de mejora en constante evolución.
Otras medidas llevadas a cabo por Faro Barcelona para la reducción de los gases de efecto invernadero han sido la instalación de placas fotovoltaicas en el centro de Castellbisbal (Barcelona) y la contratación del 100% de energía verde.
Con estas medidas y programas en constante desarrollo, la firma asume un alto grado de consciencia y sensibilidad ante la situación global medioambiental. Su principal propósito es contribuir al bienestar de las personas y de su entorno.
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