En el pasado, la masa se amasaba a mano, pero hoy en día esta tarea la realiza un procesador de alimentos. Una evolución muy similar puede observarse con las impresoras de chocolate en 3D. El modelo mycusini de la joven empresa alemana Print4Taste, aún desconocido hace unos años, está conquistando las cocinas privadas de toda Europa.
«Nuestros clientes reconocieron inmediatamente que mycusini les permite ir más allá de los límites del trabajo manual y vivir su creatividad. Además, su uso es un juego de niños. La creación de un objeto de chocolate con la mycusini no requiere ninguna configuración complicada, como ocurre con las impresoras 3D del sector del plástico. Diseña rápidamente una letra o selecciona uno de los 1.000 objetos gratuitos de la biblioteca de plantillas y listo. Entusiasmo garantizado», comenta Gerd Funk, director general de Print4Taste GmbH.
Del tamaño de una cafetera y disponible en rosa pasión, gris elegante o negro intenso, la mycusini encaja en cualquier cocina.
Además de la impresora 3D de chocolate, también incluye mycusini 3D Choco Refills, así como acceso gratuito a la extensa biblioteca de plantillas y numerosas aplicaciones para crear fácilmente sus propias plantillas 3D.
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