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Una nueva vida para la cocina del Hospital de Sabadell con Altro
20-abril-2015
El Hospital de Sabadell es uno de los siete centros de la Corporación Sanitaria Parc Taulí (CSPT) y uno de los hospitales más importantes y reconocidos de toda Cataluña.
Antes de reformarse, el Hospital de Sabadell tenía dos cocinas, separadas por un parque central, alrededor del cual se levantan los tres edificios que conforman el hospital. Pensando en optimizar tanto el espacio como el trabajo, se amplió y reformó totalmente la cocina de mayor tamaño, centralizando en ella toda la actividad. A esta reforma estructural se sumó una modernización de la gestión, pasando de la cocina tradicional a la línea fría. De esta forma, y gracias a la disponibilidad de abatidores de temperatura ultrarrápidos y carros especiales climatizados que mantienen el frío ya en las plantas, los pacientes reciben su comida puntualmente y como recién hecha, una vez regenerada con calor.
En esta obra, el suelo elegido por el arquitecto para pavimentar la cocina fue Altro Stronghold™ 30 / K30, en un tono gris, K3010 Dolphin, del que se instalaron 920 m2 en la zona de preparación de comidas y en los pasillos adyacentes. Según Jordi Culubret i Crous, arquitecto y jefe de servicio de obras del hospital, «se trataba de una reforma integral de la cocina, que databa de los años 70, requería una modernización y sobre todo una adaptación a la normativa vingente. El pavimento era fundamental para garantizar la seguridad y eliminar el riesgo de caídas y resbalones que existía con el anterior suelo de gres».
El suelo de seguridad Altro K30 es ampliamente utilizado en las cocinas industriales de todos los sectores y especialmente en el sociosanitario, donde la higiene y la seguridad se valoran por encima de todo. Se trata de un pavimento de 3 mm de espesor, totalmente antideslizante, incluso en zonas húmedas o con grasa, que ofrece la máxima resistencia al deslizamiento, la clase 3 exigida por el CTE. Además, su comodidad a la pisada, su resistencia al uso intensivo, su facilidad de limpieza y de mantenimiento y su larga vida útil, de hasta 20 años en perfecto estado, lo convierten en la primera opción entre los vinílicos.
«Conociamos estos suelos por otros hospitales y residencias, pero no los habíamos usado nunca. Elegimos Altro porque para este tipo de actividad nos pareció que en pavimentos antideslizantes, por calidad, era lo mejor. Valoramos mucho la seguridad, el cumplimiento de la normativa y también la higiene. Al ser un pavimento continuo y prácticamente sin juntas es mucho más higiénico y adaptable, además, a los distintos acabados: las medias cañas de los zócalos, curvas, etc.», afirmó Culubret.
En cuanto al proceso de instalación el arquitecto también se mostró satisfecho: «La instalación fue muy rápida y sencilla, sin problemas; y estéticamente ha quedado muy bien, perfectamente integrado con el resto del mobiliario. Aunque es nuestra primera experiencia con suelos Altro, recomendaría el uso de este modelo, que ya es un clásico para cocinas industriales». Y sobre la atención recibida por parte del distribuidor de Altro tampoco dudó: «Estoy contento, siempre que he solicitado alguna información técnica del producto la respuesta ha sido inmediata».
Altro K30 minimiza los riesgos en la cocina
Por su parte, Oriol Mir Villas, administrador de MCD Grup, la empresa instaladora de este proyecto, manifestó que «mi opinión puede parecer subjetiva, puesto que somos profesionales de la instalación de pavimentos ligeros y, por lo tanto, también de pavimentos vinílicos de seguridad, pero sin duda Altro es la mejor opción que hay en el mercado en lo que a pavimentos vinílicos de seguridad se refiere. Su espesor y su especial composición respecto a otros pavimentos ‘competidores’ le convierten en el número uno. Por todo ello resulta totalmente recomendable”. Y añadió que «tanto el arquitecto como el usuario necesitaban seguridad ante todo. Lógicamente, también durabilidad y estética. Lo que más ha de valorarse en un suelo es que funcione, que sea apto para el tránsito que va a recibir. Si además es bonito, mejor. A todos nos gusta lo bonito”.
El usuario al que se refiere Oriol Mir es precisamente la persona que está en contacto directo y permanente con el día a día de la cocina, y quien tiene la auténtica experiencia de uso práctico del suelo. En este caso es Encarna Escudero, responsable del departamento de alimentación y dietética del hospital, que se mostró encantada con el nuevo suelo: “Es una maravilla, es cómodo y sobre todo seguro, no resbala ni aunque lo intentes a propósito, ni siquiera en torno a la zona de freidora, donde siempre puede haber grasa y más riesgo”.
“Antes el suelo era verdaderamente peligroso y aún llevando zuecos especiales antideslizantes, de vez en cuando había resbalones, e incluso alguna caída seria. Nos ha cambiado la vida. En las cocinas son normales determinados accidentes y desde octubre, cuando estrenamos la cocina, no hemos tenido ni un solo accidente por caídas. La gente trabaja tranquila, segura y sin miedo” explicó Encarna Escudero.
En lo relativo al mantenimiento y limpieza del Altro K30 ella misma comentó lo sencillo que les resulta: “La limpieza es muy fácil y rápida; usamos jabón con lejía desifectante y unos cepillos de goma especiales, asi como abundante agua. Queda impecable. Es un suelo muy agradecido, no plantea ningún problema. Además es muy estético, es un gris neutro que combina con los paneles de un gris más claro y queda muy bien. Es discreto, pero permite que se vean las manchas para eliminarlas mejor”.